La elección de El camarote de los hermanos Marx, conocida por su caos organizado, se convirtió en una analogía perfecta para narrar de manera cómica y realista nuestro incidente de ciberseguridad, con muchas frases y situaciones que para todas aquellas personas que las vivieron reflejan con humor y fidelidad muchas de las cosas que realmente ocurrieron.
La escena se ambientó en el domicilio del programador Nacho Caracas (interpretado por Javier Corellano), específicamente en su área de trabajo en casa.
La decoración, ingeniosamente diseñada por Santiago Guzmán, simulaba las paredes de una habitación con cartón, destacando dibujos hechos por Javier Corellano, Olaia Merino y Mapi Pérez, incluyendo la Basílica del Pilar.
Para mantener la esencia del caos controlado de la escena original, participaron un total de 18 compañeros y compañeras, de los que 10 desempeñaron roles destacados, introduciéndose progresivamente en la escena y realizando diversas actividades dentro de ella.
Mensajes clave
- La escena arranca resaltando la vulnerabilidad de un desarrollador que no ejecuta con seguridad su trabajo, comprometiendo no solo su tarea sino la de toda la compañía.
- Las advertencias de seguridad: Representaron nuestro grado de madurez y control como empresa, especialmente relevante al operar en mercados como Arabia, demostrando que hemos superado nuestra etapa inicial de inexperiencia.
- Los de sistemas no se enteran: Reflejó nuestra evolución hacia una empresa con mecanismos robustos para detectar y analizar incidentes, aprendiendo y mejorando continuamente. La participación activa en la escena de Eduardo Gistau y David Román fue un guiño a lo que ocurrió esos días en el incidente real y demostraron, una vez más, que esta empresa está en buenas manos.
- La madre orgullosa: Simbolizó el orgullo y el apoyo incondicional hacia nuestros equipos, incluso en momentos difíciles.
- Compliance: Destacó la importancia de nuestros procedimientos y normativas, fundamentales durante el incidente de seguridad y para la atracción de grandes clientes. La demostración a los organismos de control de que los procedimientos de alerta y reacción en hiberus habían funcionado correctamente fue una labor elogiada por todos ellos.
- Comunicación: Subrayó nuestro compromiso diario con la transparencia y la imagen de hiberus en nuestros clientes y trabajadores, suministrando la información precisa y necesaria en todo momento para salvaguardar tanto nuestra reputación como la seguridad de las operaciones en todos nuestros clientes
- Conversación ciberatacantes y CEO: La escena hace un guiño a la situación real en la que los delincuentes conversaron con nosotros intentando poner en valor los datos que tenían para pedir el rescate. Sergio López conversó con los “chinos” y les comunico que lo importante para hiberus son nuestras personas y que “esas” no las tenía.
A través de esta representación, pretendíamos transmitir con determinación y humor la importancia de las medidas de seguridad y las consecuencias de no seguirlas. Nuestro incidente nos fortaleció como equipo, demostrando nuestra capacidad para gestionar y resolver crisis de manera efectiva y salir reforzados de ellas.
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