Si acudimos a la teoría, podemos decir que una aceleradora de startups es una institución pública o privada cuyo objetivo es impulsar startups, empresas de reciente creación, mediante un programa basado en convocatorias con un plazo de tiempo estipulado. Estos programas incluyen mentorización, formación intensiva, educación digital y tutorización por parte de la empresa.
¿Qué es una aceleradora de empresas?
Ya sea de carácter público, privado o un mix entre ambos, la aceleradora necesita contar con un equipo. El equipo de la aceleradora tiene, por un lado, la misión de gestionar y dinamizar el espacio, pues no se trata de un espacio de alquiler de oficinas, aquí los contactos y las relaciones son la clave. Por otro lado, necesita expertos en las distintas disciplinas de los negocios y de otros aspectos que rodean a las empresas y que son clave en su desarrollo: asesoramiento legal, fiscal, contable, laboral, conocimiento de marca, de marketing, de desarrollo web o incluso coaching… todos ellos son necesarios.
Entonces, durante tu tiempo de estancia dispondrás no solo de un espacio de trabajo, si no también de tutorías con expertos para sacar tu proyecto adelante.
Pero una aceleradora no es solo un espacio en el que empresas de reciente creación se convierten en empresas de éxito, si no que también es un espacio en el que cualquier pequeña empresa, independientemente de su año de creación puede apoyarse en mentores, expertos, tutores y enriquecer su modelo de negocio, darle un empujón a la empresa y salir adelante.
Cuando empiezas, pero también cuando estas sacando adelante un nuevo negocio, surgen dudas, surgen problemas. Contar con un equipo de apoyo que te asesore en esos momentos es sin duda la clave. Además, muchas veces fallamos, y muchas veces más vamos a fallar, sea tu negocio el que sea. Y muchas veces no solo ayudarán los expertos, también los compañeros que pasaron por allí.
¿Por qué existen las aceleradoras de empresas?
Las aceleradoras de empresas existen por varias razones. Por un lado, en los últimos años ha aumentado el interés de muchas instituciones (tanto públicas como privadas) por el mundo emprendedor y tecnológico. Por otro, en nuestro país cada vez hay más volumen de proyectos emprendedores en el ámbito tecnológico así que paralelamente surgen iniciativas que ayuden a los emprendedores a impulsar sus ideas en negocios rentables.
Hay muchos tipos de aceleradoras de empresas, pero casi todas cumplen con un mismo objetivo: seleccionar a startups en su etapa casi inicial y ayudarlas en la definición de su modelo de negocio, su estrategia de captación de clientes, sus posibilidades de crecimiento e incluso en la captación de financiación.
Pertenecer a una aceleradora, a una comunidad emprendedora, te aporta un chaleco salvavidas, una mochila cargada de recursos para que sobrevivas a tu propia travesía por el desierto del emprendimiento.
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