Buenas prácticas para lanzar con éxito tu sitio web

A la hora de planificar en desarrollar un sitio web influyen muchos factores. Lo primero, consiste en definir la estrategia digital. Es decir, qué quieres conseguir, cuáles son tus objetivos y qué necesitas para lograrlos. Esto que parece fácil, no lo es, y por ello muchos proyectos van mal encaminados desde el inicio, ya que es necesario definir qué se necesita y ver qué acciones son necesarias para ello.

Lo siguiente es conocer las necesidades del usuario. Si no existe un alineamiento entre los objetivos del usuario y los objetivos del negocio, vamos a invertir dinero y recursos en algo que no va a funcionar. Para ello,  necesitamos interactuar con él, no sólo teniéndolo en mente sino haciéndole partícipe, observando, recibiendo información y feedback de usuarios reales.

Existen diferentes metodologías con las que reunir información acerca de los usuarios, muchas de ellas extraídas del campo de la antropología: entrevistas, observación de campo, encuestas, focus groups, user journeys, definición de personas, mapas de empatía, card sortings…

Una vez analizado que podemos ofrecer como empresa, y las necesidades de los usuarios, se deben definir todas las situaciones que involucren funcionalidades mediante customer journeys.

Hay que tener en cuenta que no sólo un tipo de cliente visita nuestra web, sino que dependiendo del momento del funnel en que se encuentre sus necesidades van a ser unas u otras. Por ejemplo, si vendemos electrodomésticos, puede que tengamos un apartado para clientes particulares y otro para clientes técnicos, ya que puede que necesiten diferente tipo de información. Así mismo, no es igual un cliente particular que está al inicio del funnel de compra que quiere buscar información y precio, que uno que ha comprado la lavadora hace 1 año y medio y tiene una avería y quiere contactar con el servicio técnico.

Todo ello debe estar detallado previamente, así como la importancia de negocio de cada bloque para priorizar su desarrollo desde el inicio del proyecto porque sino es muy probable que falte algún caso de uso sin detallar.

Una vez que contrastamos que el servicio o producto que ofrecemos les resulta interesante, debemos pensar en cómo vamos a llegar hasta ellos.

Si somos una marca consolidada y conocida por el público o vendemos algo que sólo nosotros o poca gente más comercializa, estamos de suerte. Será mucho más fácil que nos encuentren y nos compren. Pero sino, y aun en los casos anteriores, se debe plantear antes de empezar el proyecto qué podemos hacer y cual es el mejor medio para llegar a ser conocidos por los clientes.

El SEO o posicionamiento orgánico en buscadores, es uno de los canales que se suelen trabajar. Consiste en aparecer lo más arriba posible cuando el usuario hace una búsqueda en Google. Muchas veces se combina con la publicidad de pago en Adwords o PPC, ya que aparecer de forma natural en las primeras posiciones es una batalla muy complicada donde se lucha contra millones de páginas web, Google images, Google local…

Es muy importante realizar un keyword research (o investigación de palabras clave) antes de iniciar el diseño de la web. Mediante la combinación de los resultados encontrados y los productos o servicios que ofrecemos, definiremos el mapa web o la arquitectura de información de la página web, así como los futuros bloques de contenidos..

La arquitectura de información consiste en clasificar y etiquetar información para facilitar su asimilación, el acceso a los distintos bloques de contenido y asegurar la consistencia y escalabilidad futura de la estructura de contenidos. Una buena arquitectura agrupará las tareas de una manera lógica para el usuario, con un fácil acceso a las tareas de segundo nivel.

Mediante el keyword research debemos establecer una relación perfecta entre los términos necesarios para obtener un buen posicionamiento orgánico y aquellos por los que busca el usuario.

En webs muy complejas, como las de la administración o salud, y ecommerce puede comprobarse si se han definido correctamente los menús y submenús mediante test con usuarios usando técnicas como el card sorting o tree testing. No sirve de nada tener un supermercado online y que el cliente no pueda encontrar las pizzas congeladas (¿dónde deberían estar en la sección de pasta o en congelados?) o una web de administración pública o de investigación, donde el usuario no encuentra nada y se desespera, porque el lenguaje utilizado por los profesionales difiere del usado por el público en general.

Una vez contrastado que la estructura y etiquetado es el correcto, la fase de definición del mapa web se dará por concluida y se comenzarán a desarrollar los prototipos. Éstos deben contener todas las especificaciones funcionales necesarias previamente definidas en el orden de priorización establecido por negocio.

Conforme se vayan realizando los prototipos se irán contrastando con el equipo SEO que cuentan con todos los elementos necesarios para fomentar el posicionamiento orgánico así como que el usuario puede navegar y encontrar información relacionada.

Antes incluso de iniciar la fase de diseño, se pueden realizar test con usuarios para confirmar que se entiende correctamente la estructura de información y contenidos planteada.

En cada proyecto se deben definir los tests convenientes a realizar. Cuantos más se realicen más feedback se dispondrá verificando que se va por el buen camino, aportando ideas y mejoras y sobre todo evitando opiniones subjetivas.

Probar y validar con el usuario, es un proceso cíclico en el que continuamente se realiza un análisis, diseño, prototipado y evaluación. Compartiendo lo aprendido con todo el equipo, para evitar dudas que puedan surgir durante la fase de desarrollo, ayuda además a empatizar a todos los implicados con el usuario.

Aprobados y validados los prototipos, se pasa al diseño de alto nivel de las pantallas. En el caso de no haber realizado test con los wireframes, es muy recomendable realizarlos en esta fase. A día de hoy se dispone de gran cantidad de herramientas como Axure o InVision que permiten hacer esto de una forma rápida. Gracias a ellos, se destacarán los principales errores que no se hayan detectado en etapas anteriores pudiendo solucionarlos antes de iniciar su desarrollo.

Una parte muy importante que muchas veces se pasa por alto, es que una página web o aplicación es un ser vivo, un proceso continuo, que nunca acaba, ya que siempre hay lugar para la mejora.

Es vital que una vez lanzado el proyecto, se realice un seguimiento para ver que se cumplen los objetivos establecidos, utilizando la analítica web y continuando el contacto con los usuarios, para recibir sus impresiones sobre el producto, y viendo que mejoras se pueden aportar para que sigan evolucionando.

Muchos proyectos se olvidan de esta fase de seguimiento y mejora, llamada también CRO (Conversion Roi Optimization). Se tiene la sensación de que cuando se lanza la web o aplicación ya está el trabajo acabado, cuando casi es justo lo contrario.

Durante la fase de desarrollo, una parte muy importante consiste en valorar y optimizar todo lo relativo a tiempos de carga y espera. Si se espera que los clientes naveguen por nuestra página web, ésta debe funcionar de forma fluida y rápida, sobre todo al ser muchas conexiones a través de móviles.

Previo al lanzamiento el equipo SEO habrá definido la estrategia de lanzamiento, y en el caso de que sea una web que sustituya a una anterior, trabajado todas las redirecciones para evitar perder ese posicionamiento ganado con los años.

Así mismo, si se han decidido que son necesarias, se activan las campañas de marketing de pago en buscadores o redes sociales. El trabajo conjunto realizado con SEO definiendo una buena red de landing pages, cobrará sus frutos al conseguir que éstas funcionen mejor con un menor coste.

Como se observa, los equipos implicados en el desarrollo de un proyecto web son muy variados. En Hiberus Digital, nuestros especialistas te ayudarán a lanzar tu proyecto digital y acompañarte a lo largo de todo el camino. Ponte en contacto con nosotros y estaremos encantados de ayudarte.