Reflexión más allá del ámbito TIC, aunque en muchos aspectos muy relacionada con el desarrollo de proyectos software. La presente reflexión pretende dar una visión correcta y sencilla del principio de incertidumbre / indeterminación de Heisenberg
En mecánica cuántica el principio de indeterminación de Heisenberg o principio de incertidumbre de Heisenberg afirma que no se puede determinar, simultáneamente y con precisión arbitraria, ciertos pares de variables físicas, como son, por ejemplo, la posición y el momento lineal de un objeto dado.
Explicación Matemática
En espacios de dimensión infinita, como los espacios de Hilbert que aparecen en mecánica cuántica, un operador puede ser hermítico pero no autoadjunto (aunque todos los operadores autoadjuntos son evidentemente hermíticos). El interés de los operadores en mecánica cuántica reside en que en la formulación de Dirac von-Neumann, los posibles valores de los observables físicos o magnitudes físicas, son precisamente de los autovalores de ciertos operadores que representan la magnitud física. Así pues el que un operador pueda ser interpretado como una magnitud físicamente medible requiere que sus autovalores sean números reales, condición que queda garantizada si los observables se representan por operadores hermíticos.
Todos los operadores importantes de la mecánica cuántica como la posición, el momento, el momento angular, la energía o el espín se representan como operadores autoadjuntos en un dominio denso de un espacio de Hilbert.
Un teorema de importancia capital en la mecánica cuántica es el que sigue: «Si y solo si dos operadores conmutan, tienen un conjunto de funciones propias en común». Si para una dirección espacial dada (x), se tienen dos operadores (magnitudes) como los operadores posición y momento lineal que no conmutan, esto implica que no tienen ninguna función propia en común. Así pues, para cualquier función de ondas, si es posible determinar de forma reproducible la posición, en la determinación del momento lineal habrá siempre una contribución estadística. Esto es la base del principio de indeterminación de Heisenber. El principio de incertidumbre se da por la no conmutación de los operadores posición y momento, o energía y tiempo.
Explicación Cualitativa
Se puede entender mejor este principio si pensamos en lo que sería la medida de la posición y velocidad de un electrón: para realizar la medida (para poder «ver» de algún modo el electrón) es necesario que un fotón de luz choque con el electrón, con lo cual está modificando su posición y velocidad; es decir, por el mismo hecho de realizar la medida, el experimentador modifica los datos de algún modo, introduciendo un error que es imposible de reducir a cero, por muy perfectos que sean nuestros instrumentos.
No obstante hay que recordar que el principio de incertidumbre es inherente al universo, no al experimento ni a la sensibilidad del instrumento de medida. Surge como necesidad al desarrollar la teoría cuántica y se corrobora experimentalmente. No perdamos de vista que lo dicho en el párrafo anterior es un símil pero no se puede tomar como explicación del principio de incertidumbre
Consecuencias del Principio
Este Principio supone un cambio básico en nuestra forma de estudiar la Naturaleza, ya que se pasa de un conocimiento teóricamente exacto (o al menos, que en teoría podría llegar a ser exacto con el tiempo) a un conocimiento basado sólo en probabilidades y en la imposibilidad teórica de superar nunca un cierto nivel de error. El principio de indeterminación es un resultado teórico entre magnitudes conjugadas (posición – momento, energía-tiempo, etcétera).
Un error muy común es decir que el principio de incertidumbre impide conocer con infinita precisión la posición de una partícula o su cantidad de movimiento. Esto es falso. El principio de incertidumbre nos dice que no podemos medir simultáneamente y con infinita precisión un par de magnitudes conjugadas.
Es decir, nada impide que midamos con precisión infinita la posición de una partícula, pero al hacerlo tenemos infinita incertidumbre sobre su momento. Por ejemplo, podemos hacer un montaje como el del experimento de Young y justo a la salida de las rendijas colocamos una pantalla fosforescente de modo que al impactar la partícula se marca su posición con un puntito. Esto se puede hacer, pero hemos perdido toda la información relativa a la velocidad de dicha partícula.
Por otra parte, las partículas en física cuántica no siguen trayectorias bien definidas. No es posible conocer el valor de las magnitudes físicas que describen a la partícula antes de ser medidas. Por lo tanto es falso asignarle una trayectoria a una partícula. Todo lo más que podemos es decir que hay una determinada probabilidad de que la partícula se encuentre en una posición más o menos determinada.
Es notorio que haya una explicación correcta de este profundo principio de la Física, porque lo normal en la nube es leer incorrecciones o futilidades.
Mi enhorabuena por este artículos.
muy bueno, gracias
Lo siento, pero creo que todas esta teoría es errónea y con cierta manipulación, evadiendo toda critica seria.
1.- Para medir el momento (incluida masa y velocidad) es prioritario hacerlo sobre la particula, es decir, conocer su situación, pues no podemos medir la partícula donde no está.
2.- En los aceleradores de particulas se demuestra que el conocimiento de cualquier dato nos ayuda a sacar los demás. En ellos se observa la situación, velocidad, masa, etc. y se extraen mediciones, unas en función de las otras.